Como un punto final

 

Como un punto final, estoy en ese pasillo obscuro, deseando la luz
el secreto de la dicha de tantos hombres, el motivo de locura de tantas personas
mi cuerpo se ha fundido con el moho de este piso flotante, hace tiempo que no me he levantado

Mi piel tan clara como un vaso de leche, no recuerda la última vez que sintió los rayos
de la madre sol, de la acompañante insincera, hace años pensaba que mis recuerdos significaban todo
más hoy no puedo ni siquiera darles coherencia, vivo a través de imagenes, que difuminadas
crean mi historia.

Esta es mi historia. Pensé, o será la de otros
Dios quizá decidió esto - reía-
Como un punto final me arrastro hacia el comedor, sintiendo el dolor de mis moretones
de mis demás cicatrices, que nadie me hizo olvidar

Recuerdo con cercanía como me sostenías en tu pecho
y creía que las cosas estarían bien
un día un angel descendió, me llevó fuera de todo
y tu quedaste allá, y tu te quedaste allá

y no lloré, como nunca lo hice 
porque hace años que no me quedan lagrimas
para nadie, ni para tí
recuerdo que antes de pasar siglos en este piso, veía distintas imagenes grises entre medio de las caras
rostros tan propios de America Latina, sonrisas tan distintas, e occidentales
expresivas, obscuras, coloridas, pero en tonos de grises.

Había llegado a la cima antes de pensar siquiera en el futuro
un sueño colectivo e iluso, eso fue el relato del punto final
y la luz llegaba todos los días, pero yo no la sentía
ni siquiera su calidez, ni siquiera al hacerle el amor

Entendí que había llegado mi fin, y me encerré de todo, de todos, y al final comprendí, al arrastrarme
Que por mucho que no comprenda que hago acá, esto fue lo que construí, esto fue lo que viví
este es mi relato, mi final, mi comienzo, mi deseo, mi placer.

Y como punto final. Solo escribía una historia más. Una historia inconclusa, pero llena de emotividad, de tonos pasteles y amor de durazno, tan propio de estos poemas, tan lindo como estas obras que tantas veces he reflejado melancolía, he reflejado amor, he reflejado vida, muerte, odio, pena, superioridad, pateticismo, sexo, sangre mucha por montones.

Y desperté en el comedor, y solo en mi ventana llegaba el sol de otoño
infiel como el invierno, duro como el verano, pero era solo un día más
y mi cuerpo mohoso, solo era un mal sueño
porque por mucho que me arrastraba el miedo
El sol llegará a nosotros igual
algún dia, como me llega a mí, siempre.