Me dueles tanto

 

Me dueles, hasta la última triza

de la mierda amorfa de masa y musculo

que alguna vez le llamaron corazón

me dueles hasta no sentir más

Ni la cicatriz mas grande que tengo en mi cuerpo

es tan dura como tus mentiras

es tan acuchillante como tu indolente silencio

Me dueles tanto, y te amo, te amo tanto amor

Me dueles hasta en la ultima célula de mis huesos, de mi piel, de mi carne

Me dueles como la mayor perdida en mi vida, el peor deseo que quise

sentirme amado, amado por ti, rodeado de tus besos

y de hacerte el amor

Hacerte el amor y amarte así 

me destroza tan duro

me revienta hasta el cerebro

y sangra y sangra mi nariz

y sigo en esa piscina de mi propia sangre

en esa injusta maldición, donde todo eras tú

donde tu eres María, pero nunca hubo un niño Jesús

y yo solo decía en gritos agónicos y esquizofrénicos

DIOS! DIOS! DIOS! 

Y la muñeca rota en finos hilos rojos

y la dulce imprenta de un amor perdido

Se desvanece en un cielo tan trizado 

Entre un haz de luz

Todo desaparece 

Y se vuelve a evaporar